Todo comenzó con un beso
Parados junto a una cama
La pasión y las caricias
Se adueñaron de nuestras almas
Nos besamos con intensidad
Nos acariciamos apasionadamente
Y de un minuto a otro
Estábamos tendidos frente a frente.
Brazos entrelazados
Piernas entrecruzadas
Y caricias inesperadas
Poco a poco se iban adueñando
De mi inocencia nunca antes tentada
Tu cabello se me esfumaba entre mis dedos
Mientras imprimías en mi cuerpo el más bello de los recuerdos
Mi mente estaba en blanco
Tus caricias y besos todo se robaron
Sentir el peso de tu cuerpo sobre el mió
Era lo mejor en ese frió
Me introducías al mundo
Del placer y la lujuria
Mientras me abrazabas
Y besabas con ternura.
Te adueñaste de mis besos
De adueñaste de mi alma
Te adueñaste de mi cuerpo
Y de la dama en esa cama.
No hay comentarios:
Publicar un comentario